Inició de la primavera; trae consigo brisas agradables
Por Jhon Eddy Paulino 

Cortesía fuente externa

SANTO DOMINGO.- La población dominicana recibió desde la noche este domingo, las frescas brisas de la primavera, que inicia éste lunes, con una duración de 92 días, donde florecen las plantaciones y trae la presencia de la agradable estación, primera del año.

La primavera es caracterizada por un aumento gradual de las temperaturas y  horas de luz, que sólo se aprecian en zonas de latitud media o alta.

Durante la presente estación no hace presencia en las regiones ecuatoriales ya que no puede hablarse de primavera, ya que por lo general sólo existen dos estaciones, una seca y otra húmeda, cada una con seis meses.

La primavera es una de las cuatro estaciones de las zonas templadas, la transición entre el invierno y el verano. El término prima proviene de (primer) y vera de (verdor).

Astronómicamente, esta estación comienza con el equinoccio de primavera entre el 20 y el 21 de marzo en el hemisferio norte, y entre el 22 y el 23 de septiembre en el hemisferio sur, y termina con el solsticio de verano alrededor del 21 de junio en el hemisferio norte y el 21 de diciembre en el hemisferio sur.

No obstante, en Argentina y Chile, el «Día de la Primavera» se celebra el 21 de septiembre, misma fecha en la que se celebra el «Día del Estudiante».

Mientras que en Bolivia el 18 de septiembre con uno o dos días de anticipación a la fecha astronómica.

En México se celebra la llegada de la primavera el 21 de marzo junto al natalicio de Benito Juárez.

La mañana de éste lunes, los habitantes de Santo Domingo Este, el Distrito Nacional y gran parte de la República Dominicana, recibieron las caricias de las brisas frescas, propia del inicio de la Primavera.

Foto fuente externa

Mientras que a parte del florecimiento de las plantas, su verdor y la frecura que se siente, las ballenas jorobadas aprovechan la estación visitar las aguas próxima a la bahía de Samaná en República Dominicana, ocasión que aprovechan para parir a sus crias, como también para aparearse.


Los cetéceos  forman un bello y atractivo espectúculo en las superficie del Oceano Atlántico, dando saltos gigantescos que son captados por curiosos, lugareños y turistas que  visitan la zona con diversos propósitos.